viernes, 9 de noviembre de 2018

Nunca caminarás solo


Nacemos y comenzamos nuestro camino por la vida. Aunque en ocasiones parezca corto o largo, nunca será lo suficiente para dejar de recordar los buenos momentos vividos y los malos tragos pasados, o las risas espontaneas y los llantos mal intencionados. En este intenso recorrido encontrarás compañeros de viaje que serán bienvenidos y eternamente recordados, y otros que mejor no haber conocido pero que, aunque no lo creas o lo notes, influyen en tu personalidad y te hacen cambiar tu forma de actuar. Hace justo un año que en mi vida se unió un compañero de viaje muy especial. Un hijo que ayudaré a caminar y al que guiaremos por la mejor senda posible.

Ya se cumplió un año de aquel día en el que tu madre y yo llorábamos de felicidad al verte. Hace un año que llegaste a nuestras vidas para hacernos feliz. Sin duda, el mejor día se escribió un 9 de noviembre cuando tu bendito llanto paralizo el tiempo. A lo largo de este maravilloso año nos has ayudado a madurar, hemos aprendido de ti y hemos conocido tus necesidades con tan solo mirarte. Las risas en el parque, la diversión al bañarte, la paciencia en la trona, la complicidad en la lactancia, la necesidad del abrazo, los llantos con tus dientes, las prisas gateando, los bailes al son de tu piano, la alegría en tu rostro cuando llego del trabajo, los paseos por tu barrio, las siestas en la playa, la tranquilidad del chupete, la felicidad cuando juegas o el descanso cuando duermes son algunas de las miles de situaciones vividas en este tiempo y que jamás olvidaremos.

Pasado todo este tiempo, ya comienzas a caminar y aunque te seguimos agarrando en algún momento te tendrás que soltar pero tranquilo, no tengas miedo a soltarte que aquí estaremos para ayudarte. Mirarás hacia atrás y allí estaremos, tocarás el suelo y te levantaremos. El camino no es fácil y lo llano u obstaculizado que esté no depende de ti. Podrás derribar barreras y aprenderás de los errores pero en este camino, recuerda, que no estás solo.

Hoy quiero darte las gracias por regalarnos este año tan especial.  Gracias por tener la habilidad de cambiar los estados de ánimos con tan solo una mirada, gracias por hacerme el padre más afortunado, gracias por sonreír como lo haces, gracias por formar junto a mama la mejor de las estampas que guardar, gracias por tu inocencia y tu frescura, gracias por tus besos, gracias por llamarme papa sin cansarte,  gracias por soñar despierto, gracias por llegar a nuestras vidas y gracias por acompañarme en mi camino.

Cuack!