Dicen de mí que soy un enamorado
común pero yo no lo veo así. Desde hace varios años aprendí que soñar es la
mejor herramienta de esperanza de la mente, tanto es así que soñé con la
persona ideal a mi lado y mira por donde con ella he dado. Soy de los que
piensa que el amor llega solo, que existe un momento en la vida de dos humanos
que sus almas coinciden en un punto tan extremo y tan lleno de pasión y
sentimientos que dejándolas actuar consiguen lo que ambas personas necesitan;
amor.
La palabra amor es difícil de
definir, incluso buscando en el diccionario te encuentras con un significado
con el que puedes o no estar de acuerdo porque cada persona lo vive de una
forma distinta. Para mí el amor solo existe cuando compartes sentimientos de
necesidad por otra persona, es decir, existe el amor hacia una madre, un padre,
una hermana o incluso un amigo pero también es cierto que el amor verdadero es
el único que se puede compartir en exclusividad con otra persona. Esa persona
te aporta felicidad, equilibrio, necesidad, sentimientos, comprensión,
vitalidad, motivación…y un sinfín de valores que solamente puede coincidir con
una persona.
Seguramente que vuestras vidas
experimentaron un cambio desde el día que os conocisteis. No hay duda de que ustedes mismos sois los culpables de
ese cambio. El poder de elegir es vuestro. Poco a poco os vais dando cuenta que
vivís por y para esa persona, pero ojo siempre con el respeto como premisa
fundamental. Durante vuestra vida juntos habrá situaciones en el que se
equivoque uno u otro, pero también habrá momentos de aciertos. Podrán venir
tiempos mejores y peores en una pareja pero el más difícil de superar es la
ausencia de una de las partes. Actualmente los problemas sociales casi que
eclipsan el ánimo de las personas pero ni la corrupción, las injusticias, las
desigualdades o la difícil situación económica que se atraviese puede suplir al
principal problema: despertaros un día y
notar la ausencia del otro. Espero y deseo que no solo disfrutéis del amor en
este día sino el resto de vuestra vida.
Cuack!
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