Un Derecho diferente. Ese es uno de los
objetivos que persigue IACTA. Esta entidad catalana, sin ánimo de lucro, es una
Cooperativa de asesoramiento jurídico y transformación social que reivindica la
función social del abogado. Prestan servicio de asesoramiento jurídico integral
que abarca desde la gestoría social hasta la representación letrada con el fin
de potenciar el concepto de justicia restaurativa. Este último concepto es una
teoría que plante que el crimen o delito es fundamentalmente un daño en contra
de una persona concreta. Todo lo contrario plantea la justicia penal
convencional de carácter retributiva que sostiene que el delito se ejerce sobre
una víctima, el Estado.
Esta cooperativa se fundó en febrero de 2012
para cubrir las diferentes áreas que componen el Derecho (penal, familia,
civil, administrativo, laboral…). Ahora, tres años después, está compuesto por
seis socias y dos trabajadoras. IACTA
nació para dejar a un lado la precarización laboral del sector y para ahondar
en el compromiso social del abogado con los problemas de la sociedad. Quieren dejar
de ver en sus defendidos a clientes y tratarlas como personas. El origen de
todo se produce en un bar donde varias abogadas se reunían para discutir lo que
no les agradaba de su profesión, lo que si veían como algo lógico, lo que
debería ser el fin último de la abogacía y un largo etcétera de temas que
fueron organizando en aquello en lo que querían convertirse. Estas seis socias, con más de 14 años de
experiencias algunas de ellas, proceden de los movimientos sociales (uno de los
mejores medios de denuncia social) donde habían participado e incluso militado.
Desde el principio tenían claro que serían una cooperativa sin ánimo de lucro
pero esto no quiere decir que no cobren por su trabajo. Cada una de las socias
y trabajadoras recibe un sueldo fijo cada mes y los beneficios se dividen en
tres partes: formación, reserva para épocas con menos trabajo y realización de
proyectos propios. En su trabajo se reúnen y colaboran con sociólogos y psicólogos
para tratar de prestar un servicio integral, de esa forma consiguen entender
mejor y ofrecer apoyo, por ejemplo, a las víctimas de violencia.
IACTA trata de ver y mostrar el Derecho de
otra manera, con otros fines y otra vocación. Una labor que estas letradas comenzaron
hace cinco años y que esperemos que duren muchos más porque la sociedad
necesita abogados con vocación.
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