Una de las palabras más sonadas en el
lenguaje latinoamericano da nombre a un proyecto social. Mensos es algo similar
a lo que utilizamos para querer faltar al respeto cuando queremos decir que
alguien es tonto, pero a partir de ahora esta palabra se conocerá por otra cosa
más. La ecología es su gran baza y el emprendimiento su mayor característica.
Os presento Mensos, el único servicio de
mensajería sobre dos ruedas del Mercado Social de Madrid. Cuenta con más de 30
clientes regulares que poco a poco irá incrementando pero aún así son capaces
de ofrecer una media de 80 envíos mensuales. Realizan envíos para asesorías,
tiendas de comidas o incluso despachos de abogados y su creador apunta que la creación
de esta empresa se debe, entre otras cosas, a la necesidad de un servicio
necesario para la ciudad debido a la aportación ecológica y eficaz en el
trabajo. Alejandro Corrot montó este servicio de mensajería en bicicleta en
Madrid después de un curso para emprendedores. Las ganas de probar algo sin
nada que perder le ofreció un impulso del que ahora está agradecido. El creador
de esta empresa social señala la importancia del valor ecológico que asume este
servicio ya que con la bicicleta, su principal medio de transporte, puede dejar
de emitir en un año casi 430 kilos de CO2. En el último mes de mayo evitaron
emitir 70 kilos de CO”, todo un gran avance en la lucha del cambio climático.
Alejandro afirma que en bicicleta los envíos llegan antes, ya que puede evitar
atascos y semáforos. Están preparados para cualquier tipo de envio ya que
utilizan una mochila a prueba de lluvia y una bicicargo con la que hacer las
entregas más voluminosas. Esta última también consta de una capota para
combatir las inclemencias climatológicas. Actualmente son dos en la empresa
pero confía que puedan llegar a ser más. Su proyecto, Mensos, fue uno de los 15
seleccionados por la UnLtd Spain, un programa de desarrollo que busca ideas y
las hace realidad sin limites, como iniciativa privada que tiene un programa de
apoyo a emprendedores sociales.
La realidad de Mensos es poder ofrecer a
Madrid la posibilidad del transporte por otros medios a los tradicionales y con
la premisa ecológica. Un proyecto social destinado a una labor social es lo que
Alejandro plasma en su empresa Mensos. Esta antigua innovación, términos contrarios
pero parecidos para explicar este fenómeno, podría implantarse en el resto de
ciudades españolas donde se respira la contaminación a gran escala. Un aire
renovado con la disminución de CO2 es posible gracias a este tipo de proyectos.
Dejemos de contaminar como mensos para cumplir el objetivo de Mensos.
Cuack!
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