La cantidad de horas que he pasado
contemplando las estrellas en el cielo de mi ciudad aquellas noches de verano
no tiene comparación con lo que va a sucederse en los próximos años. La astronomía
siempre ha sido una ciencia que a todos gusta, o al menos ha despertado cierta inquietud por cualquier
noticia relacionada con ella. Sin embargo ahora, en un proyecto que requiere
una inversión 1.083 millones de euros, es decir en 14 años, se va a construir el telescopio más
grande del mundo. Se denominará E-ELT, que traducido al español quiere decir
Telescopio Europeo Extremadamente Grande. Con esta nueva herramienta no se
podrá escapar ningún movimiento que se produzca entre los cuerpos celestes.
Tal proyecto está marcado por la iniciativa
del viejo continente europeo por tener un telescopio con el que poder observar
los diferentes comportamientos que por ahí arriba acontece. Lo sorprendente
será que, a pesar de ser un proyecto europeo, se va a desarrollar en el
desierto de Atacama en Chile. Imagino que será por la posición respecto a los
cuerpos porque sino es que no le encuentro la explicación de que sea allí. En
tal proyecto están inmersos la gran mayoría de países europeos menos España.
Vaya hombre, pertenecemos a Europa en muchas cosas y no vamos a pertenecer en
esto. Si no participamos jamás podremos decirles a los turistas americanos que
mi telescopio es más grande que el tuyo. Al parecer habría que añadir 40 millones
de euros para la inversión del proyecto, pero España no está por la labor de
participar. Que nos gusta ir a contra corriente
Los astrónomos españoles han pedido al
gobierno español participar en este proyecto. Se han manifestado casi 300
personas y han enviado una carta abierta
donde recuerdan los contras que supondrían no participar en tal proyecto.
Conllevaría a un retroceso irrecuperable en la ciencia e industria de España,
además si no participa en la construcción de este telescopio los
investigadores, centros de I+D y empresas españolas no podrán participar en
actividades ni contratos que el ESO (observatorio europeo austral) otorgará en
un futuro. Añaden que España se convertiría en el gran país europeo que no se
ha suscrito al programa.
Al parecer el problema es más económico que
de participación social pero ahora es cuando más razonable veo que todo el
dinero defraudado se utilice para estos proyectos. Dicen que hacen falta 40
millones para la inversión. Curiosamente, esta cantidad, corresponde con un millón más que lo que el extesorero de un partido político
ha declarado ante un fiscal diciendo que se lo ha llevado a otro país. Es hora
de recuperar ese dinero defraudado y aplicarlo en I+D. La investigación,
desarrollo e innovación es la llave del crecimiento.
Cuack!
Los amantes de la astronomía pueden leer con más
detenimiento la noticia pinchando en el enlace más abajo.
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