¿Alguien sabe lo que es la cooperación?

No tengo ni la menor idea de donde vivo. Tampoco sé en qué tipo de país habito, al igual que no sé cuál es la personalidad de este país. Por otros medios sé que se nos conoce como los juerguistas, los fiesteros, los vagos, los corruptos…una serie de hechos que dañan la famosa “marca España” que ahora parece tener mucha importancia. Antes de valorar esa marca de forma externa deberíamos valorarla a nivel interno. Políticos enredados en ver quien contradice más a quien. Aún sabiendo que la medida que lanza uno u otro es satisfactoria tienen por ley el no ayudar, no cooperar. Es un chiste bastante largo el que me están contando de este país. Una serie de corruptos trajeados que pasean por las calles mientras a lo lejos divisan un desahucio. Políticos jugando con las tijeras a recortar la cartulina de sanidad, educación y empleo, entre otras. Políticos tuiteros alentando a la violencia en las redes sociales. Pacificas protestas que son valoradas como actos terroristas. Realeza que va perdiendo una imagen cada vez más deteriorada. Banqueros convertidos en vendedores de estafas. Parlamentarios europeos dictaminando políticas de austeridad y luego retrayéndose de sus palabras cuando ya es tarde para hacerlo. Empresarios que juegan al “quien despido hoy” para así aumentar sus fortunas. Implantación de reformas que dañan a la clase media acercándola aún más al umbral de la pobreza. Miembros de la Unión Europea que cada vez hacen menos gala de la palabra “unión”, sin ir más lejos todos intentamos caminar al son de la Alemania de Merkel. Este país, cuya balanza de pagos se sustenta por el elevado peso de sus exportaciones, debería tener en cuenta que si los países que le compran están en situación de déficit sus ventas también se verán afectadas. Jóvenes, muy bien  formados en nuestro país, se van a dar beneficios y a desarrollar sus conocimientos fuera de nuestras fronteras. Vamos a arreglar primero nuestra “marca España” y verás como ella sola viaja al resto de países.

Pues bien, en el trasfondo de todo esto quiero que se visualice la palabra cooperación. Este sustantivo, procedente del verbo cooperar, significa colaborar con otro para la consecución de un mismo fin. ¿Acaso no es el mismo fin conseguir salir de esta situación? ¿Por qué no existe más cooperación entre los distintos partidos políticos? Si los ciudadanos hablan, ¿Por qué no se les escucha? Para conseguir sus votos si importa el ciudadano pero para el resto de acciones la labor del votante, del que te puso ahí, se convierte en inoperante. A pesar de todo esto, sigue vivo el espíritu social del cooperante anónimo. Anónimos unidos a una causa social que tienen como objetivo cooperar. Son muchos los líderes de plataformas, movimientos, generaciones y demás organizaciones que quieren un cambio, y esto es posible. Piden la colaboración ciudadana y estos les apoyan, sin embargo piden la colaboración de cualquier administración pública, autonómica o estatal, y esta es derogada. La cooperación es viable y factible, solo queda que los que tienen que hacerla sean conscientes de que un cambio es posible. A las personas que cuando abren las puertas de sus armarios cogen un traje chaqueta les aconsejo que un día se pongan en el papel del que coge una camiseta y utilicen la palabra cooperación con la misma fuerza que ellos lo hacen.

Cuack!