Menos mal. Qué alivio más grande
se apodero de mi, seguro que igual que a muchos cuando lean la noticia de hoy,
al enterarme hace escasos días de esta gran noticia. En una época donde los
negocios y las pymes cada vez son menos y donde parece que el crecimiento
económico se retrasa más de lo deseado llegan noticias, como la de hoy, donde
se reaviva la esperanza y supervivencia de algunas de las empresas más características
de la economía española. Ya no solo por su influencia en la economía sino por
lo que representa, los españoles estamos de enhorabuena al saber que una de la
empresas con más historia y con un gran carisma aguanta este vendaval llamado
crisis y que ha afectado a otros compañeros de manera distinta a la que ellos
les ha acontecido.
Las famosas barritas de chocolate
Huesitos seguirán fabricándose en España. Ese es el mejor resumen que podemos
comentar tras el comunicado que ambas empresas, Mondelez Internacional y
Chocolates Valor, han enunciado hace pocos días. La propietaria hasta ahora de
la marca era Mondelez Internacional y tenía su fábrica en Zaragoza, en concreto
en el pueblo de Ateca. Este pueblo, que vive prácticamente de esa fábrica, no
podía ver como se cerraba el mayor sustento económico y laboral del lugar. Para
satisfacción de todos, las barritas no dejarán de fabricarse ya que la empresa
Chocolates Valor ha comprado la unidad productiva y a partir de ahora se
encargará de su fabricación y venta. La marca “Huesitos” tiene su origen como
marca española, luego paso a manos de la empresa Kraft, que más adelante pasaría
a llamarse Mondelez Internacional, y ahora el producto vuelve a manos de una
empresa española, lo que seguro que realzará su facturación.
Esta bonita noticia, que hace
recordar la parte más nostálgica de lo que el producto Huesitos representa,
llega en un momento importante donde la supervivencia de la empresa se ha
tambaleado más de lo que ellos mismos esperaban. Esperemos que ahora, con una
marca española volviendo a ser la protagonista de su lanzamiento, vuelva a los
niveles de antaño y a hacernos disfrutar aquellos momentos en los que un dulce
aperitivo amenizaba la mañana o la tarde, dependiendo del momento en el que nos
lo tomáramos. En el recuero solo me queda decir que he visto a mi padre comer
Huesitos, yo los he devorados y la verdad que no me imagino el futuro sin ver a
mis hijos comiendo ese snack.
Cuack!
Fuente: CADENA SER
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